No es que en Barbados no haga calor en esta época (lo hace, y mucho), pero estamos aún en temporada de lluvias y hasta noviembre no podremos disfrutar con garantías de lo que todo viajero busca en uno de los lugares más legendarios del caribe: sol, playas, aguas transparentes, relax. Por eso os proponemos que planifiquéis con tiempo y penséis en viajar a Barbados a partir de noviembre, justo cuando comienza la larga temporada de verano.
No os vamos a aburrir con un largo relato de los parabienes de esta pequeña isla de apenas 34 km de largo y 23 de ancho y que es uno de los países más pequeños de la Tierra, pero sí os contaremos algunas curiosidades, como que Barbados fue refugio de corsarios y piratas, que aprovecharon sus muchas grutas para esconderse de las armadas española e inglesa. O que sus playas llegan en conjunto a una longitud de 96 km. O que en su selvático paisaje puede uno ver monos procedentes de Senegal.
En fin, son muchas las cosas que os podríamos contar, pero hoy simplemente queremos poneros los dientes largos y enseñaros esos paisajes marinos con los que todos soñamos y que están más alcance de la mano de lo que pensáis.
Y recordad: no es el viaje, es la aventura de viajar. Barbados os espera.