La India: El lugar más místico y espiritual del planeta, sin duda, habrá un antes y un después en nuestras vidas y viajes. Un lugar donde sólo la belleza que poseen los indios en sus ojos es comparable a la de sus sonrisas.

Aunque sus idiomas oficiales sean el Hindi y el inglés, se hablan centenares de lenguas y dialectos, una prueba más de la variedad de cultura que nos encontraremos.

¿Cuándo viajar?

Debido a su gran extención y su variedad climática es imposible, señalar con exactitud la mejor época para visitar la India. Por ejemplo, para visitar el sur de la India, la mejor época suele ser de Enero a Septiembre, para evitar los monzones. En las regiones del norte, la mejor época para viajar es la fresca estación seca, entre noviembre y marzo . Pero en general, los meses más recomendables para viajar en gran parte de la India son de Octubre a Marzo.

¿Qué ver?

Si vamos a las regiones del norte debemos visitar Nueva Delhi, tendremos que ser pacientes ya que la primera impresión puede ser impactante pero pronto nos cautivará los encantos de esta gran ciudad, dividida en Old Delhi y New Delhi, esta última influenciada por el imperio británico. Aquí nos podemos encontrar tanto a un elefante circulando por una rotonda como a un encantador de cobras con su espectáculo montado en plena calle. Nueva Delhi nos hará de enlace para visitar las ciudades del norte como Agra, donde podremos contemplar el majestuoso Taj Majal, emblema turístico de la India.

Benarés (también conocida como Varanasi), la ciudad eterna de Asia. Es el centro religioso de la India, construida a orillas del río Ganges, donde podrás ver a las mujeres limpiar sus ropas y telas, todo un carnaval de colores. Al parecer cualquiera que acabe allí sus días (no importa sus creencias religiosas o lo grande que hayan sido sus pecados), será transportado directo al cielo.

Rajasthán, esta provincia es la más señorial de todo India, repleta de palacios conserva aún todo el esplendor de los Raj, los jefes de las pequeñas ciudades-estado que gobernaron hasta bien entrado el siglo XX. Entre estas ciudades destaca Jaipur conocida popularmente como la ciudad rosa, color que los originarios de la región asociaban a la hospitalidad, así que, serás muy bien recibido, sólo tienes que relajarte y disfrutar de sus calles y tiendas, pero Rajhastan nos oculta otras joyas como Jhodpur con su famoso fuerte, Udaipur erigida a orillas del lago Pichola o la lejana Jaisalmer a los pies del desierto del Tar

Chennai, la gran ciudad del sur de la India, su puerto ha visto pasar gran parte de la historia moderna de Asia, parada obligatoria de la Ruta de las Especias. Muy cerca de Chennai, se encuentra el pueblo de Mahabalipuram, sin duda, una de las joyas del sur de la India. Aquí podrás contemplar infinidad de templos excavados en las piedras, enormes dioses esculpidos en granito de la religión hinduistas o relieves de elefantes a escala real. Tiene un mercado donde podrás ver y comprar todo tipo de esculturas.

Sumérgete en los backwaters, un lugar idílico, formado por la acción del mar, creando islas con palmeras cocoteras y un microclima único, donde se une el mar Arábigo con ríos y lagos de agua dulce. Merece la pena madrugar para contemplar el amanecer, con sus colores y paisajes únicos.

Acabaremos nuestro viaje en Cochín, un pequeño pueblo pescador donde podremos ver la danza típica del sur de India, donde sus bailarines llevan máscaras de mil colores, todo un espectáculo. No debes perderte a los pescadores pescando con el método tradicional chino, mientras despedimos el día disfrutando del atardecer.

Adéntrate en las calles de Kathmandu, la capital de Nepal y podrás perderte por sus ancestrales calles, donde siempre estarás observado por la estupa esférica de Bodnath, que está coronada por una torre donde están pintados los ojos de Buda. Estos preciosos ojos pintados miran a los cuatro puntos cardinales. Y por supuesto, no pueden faltar las preciosas banderas de colores que le dan un aspecto muy festivo a Bodnath.

¿Qué comer?

Seguramente lo primero que pensamos cuando hablamos de la gastronomía de la India son las especias, los sabores picantes y las verduras pero bien es cierto que es tan influenciada como su cultura. Ya que tiene una mezcla de tradiciones hindú, musulmana, portuguesa y británica entre otras muchas.

Para desayunar te recomendamos una Samosa, empanadilla de forma triangular rellena de verduras y patata, suelen ser picantes.

Elegir que almorzar nos puede llevar un tiempo, ya que el menú es muy extenso, te recomendamos el Palak Paneer, delicioso queso frito con espinacas, acompañado de arroz cocido, para chuparse los dedos.

Si te encuentras en una zona costera, podrás disfrutar de una gran variedad de pescado fresco, aliñado con Masala, una mezcla de diferentes especias, que le da un sabor y aroma característico.

¿Dónde dormir?

La India nos ofrece gran variedad de hoteles y Guesthouse. Podrás alojarte en hoteles como el de Jal Mahal (que significa Palacio en el agua) construido en medio del lago Man Sagar en la cuidad de Jaipur, Rajasthan, donde podrás deleitarte cada instante con la refinada decoración interior y como no, con sus espectaculares vistas de las colinas Aravalli. La mayoría de Guesthouse en la India parecen auténticos museos, por ejemplo en Benarés, podremos disfrutar de Ganpati Guesthouse, disfrutando de un Lassi (batido de frutas típico de la India) en su patio mientras contemplas la magia del río Ganges y sus Ghats, donde verás a las mujeres limpiar sus ropas y telas en la orilla del río, todo un festival de colores.