Podríamos simplemente decir que la Tumba Imperial Tu Duc se encuentra al sudeste de la ciudad de Hue, a orillas del rio Perfume, y nuestra imaginación se trasladaría de lleno a un relato legendario, a lugares rodeados de lagos con nenúfares y lujosos palacios escondidos tras el espesor de la selva vietnamita. Ni siquiera la potente y bélica mitología occidental sobre el Vietnam del s. XX puede ahogar el sonido reverberante de los nombres del Vietnam imperial y de los emperadores de la dinastía Nguyen: Gia Long, Minh Mang, Thieu Tri, Tu Duc, Dong Khanh, Khai Dinh… verdaderos faraones del sudeste de Asia, descansan hoy, como sus émulos egipcios, bajo la majestuosidad de sus mausoleos privados; y de todos ellos, es Tu Duc, perseguidor de cristianos y último emperador independiente de Vietnam, quien tiene el honor de darle el nombre a una de las tumbas más famosas del mundo.Si el viajero se decide a viajar a Vietnam, deberá saber que la fama de la tumba de Tu Duc no procede de sus fastuosas tallas, ni siquiera de la enorme estela conmemorativa que anuncia la entrada del emperador en la morada de los dioses. Su estupendo estado de conservación, la perfecta integración entre arquitectura y naturaleza, son sólo elementos que acentúan el misterio y la atracción ejercidos por este paraje milenario. Pues cuentan que en esta tumba, o tal vez en sus alrededores, se esconde todavía el tesoro enterrado junto al cuerpo del emperador. Recordado por la leyenda negra como un soberano tiránico e irascible, Tu Duc fue en realidad un hombre que quiso modernizar las agotadas estructuras administrativas del imperio, y que cultivó placeres artísticos como la poesía, la historia y la literatura, promocionando en persona las artes a través de los territorios del imperio. Amante titánico (se le atribuyen más de 100 concubinas), no dejó descendencia, y se dice que al morir, y con el objetivo de evitar saqueos, su cuerpo fue escondido en un lugar cercano a la tumba junto a magníficos tesoros. Pero no hay emperador sin leyenda negra, y también cuentan que los 200 esclavos encargados de ocultar el destino final del soberano fueron decapitados una vez terminada su tarea. Desde entonces, son muchos los que han buscado, sin éxito, los restos del emperador escondido, esperando encontrarlo en su cámara secreta, rodeado de oro, riquezas y piedras preciosas.
El sepulcro imperial de Tu Duc es en realidad un complejo de 12 hectáreas de superficie formado por 50 construcciones independientes, incluidos los mausoleos de la emperatriz Le Thien Ahn y del hijo adoptivo de Tu Duc, el emperador Kien Phuc, asesinado tras apenas 8 meses de reinado. El mausoleo, rodeado por un muro de piedra, lo integran dos zonas diferenciadas: la zona de los templos, a orillas del fastuoso lago Luu Khiem y la zona de las tumbas, donde se sitúa la estela más grande de todo el país, escrita por el propio emperador y que retrata, en primera persona, los hechos más relevantes de su reinado, incluida su frustración por no tener descendencia. Pasear por estos parajes de aroma mitológico, observar los nenúfares que cubren la superficie del lago, imaginar los tesoros escondidos, las intrigas que animaron antaño los pasillos y rincones de palacios y mansiones, es uno de los placeres que se ofrecen al viajero que decida viajar a Vietnam y acercarse a la ciudad de Hue, donde los más intrépidos podrán acudir al embarcadero Ben Than y llegar al mausoleo navegando por el río, como los antiguos súbditos de los emperadores de la dinastía Nguyen.
¡Consulta nuestros viajes a Vietnam en el siguiente enlace!